"Gracias al amor por la música de Federico el Grande y su sobrino Federico Guillermo II, Berlín y Potsdam atrajeron a músicos de toda Europa" |
Berliner Blau
Obras de J.C.F. Bach, W.F. Bach C. Graziani y C. Schaffrath.
Berliner blau (Azul de Prusia), descubierto por el fabricante de pinturas J. J. Diesbach alrededor de 1706, se convirtió en un símbolo de Prusia y en el color de la capa del uniforme del ejército prusiano. Fue el primer pigmento de uso común relativamente resistente a la luz. Antes del Azul de Prusia solo encontramos el Azul Egípcio, cuya fórmula, tras pasar a manos de los artesanos del imperio romano, fue olvidada para siempre. Prusia fue a lo largo de la segunda mitad del siglo XVIII uno de los mayores centros musicales de Europa, especialmente en lo que se refiere a la música instrumental. Gracias al amor por la música de Federico el Grande y su sobrino Federico Guillermo II, Berlín y Potsdam atrajeron a músicos de toda Europa. Estos músicos contribuyeron a afianzar el liderazgo cultural de Prusia sobre todo el continente. El violoncello atrajo especial atención en la vida musical de la corte, debido a que el mismo Federico Guillermo II era un violonchelista con mucho talento. El príncipe recibió clases de Carlo Graziani, violonchelista italiano que trabajó durante muchos años en Berlín. Además contrató a Wilhelm Friedrich Ernst Bach (hijo de Johann Christoph Friedrich Bach) como director musical de la Corte. Federico Guillermo II fue conocido por su increíble apoyo a las artes, especialmente a la música y a la arquitectura. Con este programa, queremos ofrecer una imagen de la vida musical que la corte prusiana disfrutó a lo largo de esas décadas. |
L'eco di Parthenope
Obras de A. Scarlatti,F.Supriani, G. de Ruvo, R. Greco, F.Alborea y G.B. Pergolesi.
Según la mitología griega, Nápoles fue fundada por la sirena Parténope. Desde entonces, ha sido una de las ciudades habitadas más antiguas del mundo y siempre ha sido un importante centro de la cultura mediterránea. En los primeros años del siglo XVI, la ciudad perdió su independencia y entró en un largo período de dominación extranjera, primero como un virreinato de España (1503-1707), y más tarde por Austria (1707-1734). Durante mucho tiempo, se pensó que este periodo fue decadente desde el punto de vista cultural. Esta teoría ha sido recientemente reevaluada y ahora el Nápoles de la Edad Moderna está considerado como el gran centro de la cultura europea que fue antaño. Desde el siglo XVI, cuatro instituciones benéficas conocidas como conservatori comenzaron a especializarse en la educación musical de niños huérfanos o pobres. Por una parte se cubría la creciente demanda de músicos para los diferentes actos en la ciudad, y por otra ofrecían una carrera musical a los niños. El canto, los instrumentos de teclado, la flauta de pico, el violín y el violonchelo fueron algunos de los instrumentos que se enseñaban a los alumnos de estos conservatori. El violonchelo, instrumento que ya se había empezado a desarrollar en el norte de Italia alrededor de 1680, disfrutó de una especial atención en los conservatorios, siendo F. Alborea, R. Greco o F. Supriani algunos de sus más notables profesores e intérpretes. El legado de estos profesores e intérpretes atesora un inmenso valor histórico y musical que ha permanecido completamente olvidado hasta fechas muy recientes. |
"El violonchelo, instrumento que ya estaba en desarrollo en el norte de Italia alrededor de 1680, disfrutó de fama y atención en los conservatori, lo que condujo a una revolución profunda en su técnica y su repertorio"
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